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Miércoles de fábula

MIÉRCOLES 5 de marzo 

Un día, el Rey Sol llamó a todos los días del año para una gran reunión. Les dijo que había llegado el momento de preparar a niños y mayores para un tiempo muy especial, el tiempo de la Cuaresma, que empezaba con el Miércoles de Ceniza.

¡Pero si faltan 40 días para la fiesta del Domingo con Jesús resucitado! Contestó el miércoles de Ceniza, un día pequeño y tímido

Pero, aunque falte mucho, la cuaresma empieza hoy. ¡Hoy es miércoles de ceniza! La cuaresma empieza contigo. Contestó el Rey Sol.

El miércoles de Ceniza, entonces preguntó: ¿Qué debo hacer yo, Rey Sol?

El Rey Sol respondió: “Tu misión es recordar a los niños y mayores la importancia de pensar mucho cómo hacer las cosas mejor”. Llevarás contigo cenizas, símbolo de humildad y renovación. Al ponerlas en las frentes de las personas, les recordarás que, aunque todos cometemos errores, siempre podemos empezar de nuevo y ser mejores.  Dicho y hecho, el día miércoles tomó su bolsa de cenizas y tocó la frente de cada niño y persona que quería ser amiga de Jesús. 

Y así el pequeño día miércoles ocupó el tiempo recordando a todos la importancia de cambiar, de preparar sus corazones para volver a brillar después del largo camino que les esperaba…¡La cuaresma había comenzado!

Oración

Padre nuestro

MIÉRCOLES 12 de marzo 

El buen samaritano

Un hombre iba viajando de Jerusalén a Jericó cuando fue atacado por ladrones, que lo dejaron herido y tirado en el camino. Un sacerdote pasó por allí, lo vio, pero siguió su camino sin ayudarlo. Lo mismo hizo un levita, pero finalmente un samaritano, al verlo, se acercó, lo cuidó, le vendó las heridas, y lo llevó a una posada para que se recuperara.

El samaritano, que no era del mismo pueblo que el hombre herido, mostró amor al ayudarlo sin esperar nada a cambio. También actuó con justicia, cuidando de alguien que estaba indefenso, y tuvo paciencia al tomarse el tiempo necesario para atenderlo con cariño.

vídeo fábula: https://www.youtube.com/watch?v=7_sArxpUQho 

Reflexión

"El buen samaritano nos enseña a actuar con amor hacia todos y todas, incluso si no son de nuestro mismo grupo o si nos han hecho daño en el pasado. También nos muestra que la justicia no es solo hacer lo que es correcto, sino también ayudar a aquellas personas que necesitan nuestra ayuda. Y la paciencia es esencial para escuchar y actuar con calma cuando vemos el sufrimiento de las demás personas."

Oración

"Para que María nos acompañe a vivir el amor, la justicia y la paciencia con todos los que encontramos en el camino.
A tu amparo y protección…

MIÉRCOLES 19 de marzo

Había una vez un hombre llamado San José, que vivía en un pequeño pueblo llamado Nazaret. José era un carpintero muy hábil, pero lo que más resaltaba de él era su gran corazón lleno de amor. Un día, conoció a María, una joven amable, y juntos formaron una hermosa familia. A José le encantaba cuidar a su familia y siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás con una sonrisa.

Cuando nació Jesús, José lo cuidó con ternura, enseñándole a ser justo y bondadoso. José le mostró el valor del trabajo duro y la importancia del amor. Jesús aprendió de su padre a ser generoso y a tratar a todos con respeto. San José siempre protegía a su familia, convirtiendo su hogar en un lugar de paz y alegría.

Oración

Querido Dios, en este Día del Padre, te agradecemos por San José, un modelo de amor y dedicación. Ayúdanos a ser como él, cuidando de nuestras familias con amor y bondad. Amén.

MIÉRCOLES 19 de marzo (2).jpg

MIÉRCOLES 26 de marzo

https://youtu.be/a9GTDJqImIY?si=B7RELR_m9SL3RLve

El perdón es como limpiar un corazón que se siente triste o enojado.

A veces, cuando alguien nos hace algo que no nos gusta, podemos sentirnos tristes o enojados. Pero, cuando perdonamos a esa persona, es como si limpiáramos esos sentimientos malos y volvemos a sentirnos felices y tranquilos.

Es como cuando alguien te quita un juguete y luego te lo devuelve. Si le dices "está bien, te perdono", ya no estás enojado y puedes jugar otra vez.

Cuando perdonamos, no guardamos rencor ni malos sentimientos, y eso nos hace sentir mejor. Y lo más bonito es que, cuando perdonamos, también somos más amables y amorosos, como Jesús nos enseñó.

El perdón es un regalo que le damos a los demás y a nosotros mismos. Cuando perdonamos, estamos siendo muy buenos y mostrando mucho amor.

Oración

Padre nuestro…

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Fundación Educativa Escolapias

A tu amparo y protección

Pastoral Soria
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